Capítulo 557

Si eso era cierto, ¿por qué todo mundo se lo había escondido? Alan la miró con desprecio, pero justo cuando iba a hablar, una voz fría sonó detrás de ellos. “Señor Rios, si tiene tiempo para decir tonterías, ¿por qué no se encarga de los negocios de su compañía?”. Alan miró a Neil con una expresión desagradable. La cirugía había terminado, ¡así que incluso si no cumplía con su palabra y volvía a atacar a la Corporación Remus, Silvia no podría hacerle nada! “Señor Remus, no tiene que preocuparse por mi compañía. Si tiene tiempo, debería preocuparse por la Corporación Remus. ¡Asegúrese de no caer en bancarrota de repente!”. Cuando escuchó esta advertencia, Neil levantó sus cejas con diversión. “Señor Rios, parece muy confiado”. Alan quiso responder, pero el teléfono en su bolsillo comenzó a sonar. Cuando vio que era una llamada de su secretario, frunció el ceño y respondió el teléfono. La expresión de Alan se llenó de resentimiento tan pronto escuchó lo que dijo su secretario. En