Capítulo 21 Quiero un Bono

Ana salió corriendo y llorando, mientras todos me miraban sorprendidos. Sonreí a los espectadores y dije: —¿No tienen de qué depender y aún así se atreven a perder el tiempo aquí? Pude verlo en sus ojos, estaban asombrados de verme fuerte esta vez, a diferencia de mi habitual debilidad. Sin embargo, no era mi intención complicarle la vida a Ana; si ella no me molestaba, estaría encantada de llevarnos bien. Pero claramente, ella no quería eso. Al regresar al departamento de diseño, noté que las miradas de todos hacia mí habían cambiado. La empresa es grande, y los círculos de chismes también. Como era de esperar, al abrir Twitter, vi un grupo de personas comentando sobre lo que acababa de suceder: [¿Qué le pasa a Clara? La he visto tan delgada últimamente, ¿acaso algo malo le ocurrió?] [¿Tal vez está harta? Después de ser engañada durante tres años, ¿quién no enloquecería?] [Ana corrió llorando a la oficina del presidente Yago, apuesto a que Clara será reprendida.] [Apuesto dos dólares