Capítulo 85

Negué con la cabeza: —Aún no he comido. Víctor se disculpó de inmediato: —Lo siento, estaba tan ocupado con el trabajo que perdí la noción del tiempo. —Elige lo que quieras comer, yo invito como disculpa. No rechacé su oferta: —Entonces comamos en el restaurante del segundo piso. —No escatimes. —Añadió Víctor, consciente de que raramente como aquí y que no sé dónde es bueno. Así que me llevó a un restaurante cercano. Una vez sentados, el camarero nos acercó el menú. Después de que Víctor ordenara algunos platos especiales, comentó: —La comida aquí es completamente diferente a la de la cafetería, deberías probarla. —De acuerdo. —Asentí. Si resulta ser buena, podría traer a Andrea aquí cuando cobre mi sueldo. Víctor hizo una pausa antes de preguntarme: —¿Tienes planes de buscar novio próximamente? Su pregunta me tomó por sorpresa: —¿Por qué preguntas eso? —Si tienes esos planes... —Víctor eligió sus palabras con cuidado: —Entonces Andrea eventualmente no podrá seguir llamándote mamá. —De