Capítulo 38

Sergio estaba algo apurado: —Pero Lucía está embarazada, enviarla a recogerlo no es seguro. Incluso la maestra, que generalmente tiene buen temperamento, se molestó al escuchar las continuas excusas de Sergio: —¿Entonces, no tienes tiempo para venir a buscar a Diego? ¿Tu esposa no puede venir por razones de salud? Sergio respondió avergonzado: —Sí. La maestra no podía entender cómo podían ser tan irresponsables los padres: —¿Qué vamos a hacer con Diego entonces? Sergio no sabía cómo responder a su pregunta, solo pudo mantenerse en silencio. Los dos se quedaron en un impasse. Finalmente, fue Diego quien habló, proponiendo una solución: —Papá, entonces, ¿puede la maestra llevarme a casa primero? —¡Claro! —Sergio respondió con impaciencia: —Sería un gran favor. La maestra casi quiso rodar los ojos, en todos sus años enseñando, nunca se había encontrado con padres tan absurdos. Pero por la seguridad del niño, tomó la iniciativa de llevarlo a casa, y en el camino no olvidó l