Capítulo 74

—Sele, ¿no habías acordado cenar conmigo? Selena enciende la pantalla de su teléfono, que muestra la hora: son las dos y media de la tarde. —Presidente Jorge, ¿acaso es necesario cenar tan temprano? —Me preocupa que te quedes atrapada en el tráfico. Selena responde: —No me quedaré, solo asegúrese de escoger un buen restaurante. Durante la pausa en su conversación, la solución para la infusión de Pedro se termina y él, sin esperar a la enfermera, se quita la aguja por sí mismo. —¿Estás loco?— Selena realmente no sabe qué decir. ¿Quién se quita la aguja por sí mismo? —No lo estoy.— Pedro responde con indiferencia, —En los hospitales de Estados Unidos no tratan tan bien, todos se quitan la aguja ellos mismos. —Está bien.— Selena saca las llaves del coche de su bolso, —Vamos. —Adiós, presidente Jorge, le deseo una pronta recuperación. Pedro es especialmente sarcástico, lo que provoca que Jorge no pueda evitar fruncir el ceño. Selena lleva a Pedro de vuelta al hotel, luego gira y regresa a