Capítulo 20

Sonreí amargamente: —Papá, ya no hay vuelta atrás para mí. Además, Andrea no vale la pena. Miguel suspiró: —¿Entonces qué planeas hacer? ¿Criarás a los niños sin Andrea? Asentí: —Por ahora, eso es todo lo que puedo hacer. Me esforzaré al máximo para darle a Sergio la mejor vida posible. Miguel guardó silencio por un momento, luego dijo: —Gabriel, recuerda, pase lo que pase, siempre serás mi hijo. Beatriz y yo siempre estaremos de tu lado; si necesitas ayuda, solo dínoslo. Miré a Miguel, conmovido: —Gracias, papá. Lo haré. Al salir de Casa González, ya era muy tarde. Sergio se había quedado dormido en el coche, y lo llevé suavemente de regreso a casa, acostándolo en su cama. Salí de la habitación en puntillas y me senté en el sofá del salón, encendiendo el móvil. De repente, varias notificaciones de noticias saltaron en la pantalla. Fruncí el ceño y abrí una de ellas. [¡Impactante! El actor Pablo visto en una cena nocturna con una misteriosa bella mujer; ¡nueva relación amorosa al descu