Capítulo 120 Los Mayores

—No estoy defendiéndola, simplemente estoy exponiendo los hechos. —¿Qué hechos? ¿Que Mónica eligió a Pablo para casarse en una familia adinerada y lastimó el corazón de mi madre? ¿o que ahora que Pablo la ha dejado, ha vuelto a buscar a mi madre? ¿Por qué puede pasearse como si fuera su casa y salir y entrar cuando se le dé la gana? Ana apretó los puños, sus pestañas bajadas proyectaron una sombra oscura bajo sus ojos, su expresión era de una ira tan densa que no se podía disolver. —Sergio, la conozco desde hace más de diez años. Sé muy bien cómo es: con tal de alcanzar lo que quiere, no le importa manipular a quien necesite. Sergio escuchó sus palabras, y su mirada se volvió fría: —¿Realmente la conoces? ¿O siempre la has visto con desdén? No te gusta, así que todo lo que hace te parece incorrecto. —Yo... —Ana se quedó sin palabras por un momento. Irritada, dijo: —Sergio, ¿es difícil de entender lo que digo? —Porque sé que no es como tú dices. No la acuses más en el futuro. La voz del