Capítulo 65

—¿No quieres que me vaya? —preguntó Vicente, sonriendo. —¡No! ¡Vete ya! —respondió Ana con coquetería. En realidad, ella deseaba que Vicente se quedara un poco más. Solo se sentía segura cuando él estaba cerca, especialmente para dormir. Esa noche, tras lo ocurrido, Oscar había muerto en el jardín. Aunque Ana era una mujer fuerte, aún sentía miedo. Sin embargo, no quería mostrarse débil frente a Vicente; no podía perder su dignidad. —Si me pides que me quede, podría decidir no irme —dijo Vicente. —¡Sigue soñando! Vete ya, me irritas —contraatacó Ana con obstinación. —Está bien, entonces me voy Vicente se dirigió hacia la puerta de la habitación. Ana movió los labios, pero no logró hacerse oír para detenerlo. —Por cierto, Oscar murió en tu jardín, no estaba conforme con su muerte; ten cuidado, podría volver como un espectro malévolo en medio de la noche para reclamar tu alma —dijo Vicente justo antes de abrir la puerta. —¡Vicente! Ana ya estaba asustada, y al oír eso, su rostro camb