Capítulo 59

No esperaba que las cosas se pusieran tan serias, Isabel puso una expresión grave, —¿No han contactado a la policía después de que comenzaron las agresiones? —¡Contactar a la policía es inútil! El líder del pueblo mandó a su hijo lejos y al volver escuchó lo que decían. Sentado en el umbral de la puerta, consumiendo cigarrillos uno tras otro, escuchó a Isabel sugerir llamar a la policía y escupió. —Esa banda de incompetentes, con todas sus excusas, ¡ni la policía puede hacerles frente! Rosa también empezó a llorar, —Además, se aprovecharon de que los hombres estaban en el trabajo para atacar a las mujeres y niños en casa, ¡qué crueldad y falta de alma! —Un niño de pocos años quedó gravemente herido y en unos días más tendremos que sacarlo del hospital, ay... Víctor frunció el ceño: —Si no está recuperado, ¿por qué sacarlo del hospital? Isabel miró a Víctor desde la distancia, ¡este hombre realmente estaba desconectado de la realidad! ¡Eso provocaba una rabia inexplicable! —Todos depend