Capítulo 168

Entonces, llegaron al Greenwood Cemetery.  Stella siguió de cerca a RK hasta que, después de un buen trecho, se detuvo en seco. Miró hacia arriba y vio que había un hombre parado unos pasos adelante. Era Aden Smith. Tuvo una sensación de miedo e intranquilidad proveniente de su corazón y, sin pensarlo dos veces, se acercó a él. Habían pasado varios años desde la última vez que lo había visto. Después de divorciarse de RK, había desaparecido de la ciudad. No sabía nada sobre la relación entre los dos hombres ni sobre los cambios que había tenido en los últimos años.  Pero, excepto por su apariencia, Aden parecía haber cambiado. En el pasado, su rostro era encantador y hermoso, ahora cada línea de su semblante expresaba una frialdad escalofriante y aterradora. Tenía unos treinta años, el pelo corto y vestía una camisa negra de cuello abierto, que dejaba entrever una cicatriz en la clavícula.  Se detuvo frente a él, abrió un poco la boca y la sintió seca. "¡Aden, cuánto tiempo sin verte!"