Capítulo 40

El teléfono de Avery sonó diez minutos después. Ella contestó, colgó, le envió un mensaje a Tammy y se fue apresuradamente a la salida del hotel. Jun observó la espalda de Avery mientras esta salía rápidamente y sonrió. ¿Cómo había encontrado ella a un hombre para dejar en ridículo a Elliot Foster a sus espaldas? ¿No podía quedarse tranquilamente a su lado? ¿Dónde iba a encontrar un hombre mejor que Elliot Foster? Jun no tenía ni idea de lo que ella estaba pensando. Las cejas de Tammy se fruncieron mientras respondía: [¿Cuál es la prisa? ¿Es tan urgente?]. Avery: [¡Extremadamente urgente! ¡Te veré pronto!]. El que había llamado a Avery era el guardaespaldas de Elliot. Le había indicado que la esperara en la entrada del hotel. Si ella no escuchaba, él iba a romperle las piernas. Avery aún sufría por la experiencia traumática del pasado con el guardaespaldas. Era un hombre cruel. Aunque sabía que actuaba por orden de Elliot, era mejor prevenir que lamentar. Un coche negro