Capítulo 294

Pero apenas había comenzado su turno en la tarde, cuando sonó su celular. Era una llamada de Pablo, y ella tomó su celular y salió de la tienda para contestar. —Doctor Pablo. —Señorita Lucía, ¿tiene tiempo para pasar por el hospital?— Pablo sonaba como si estuviera en la calle, con muchos ruidos de autos de fondo. Lucía apretó el teléfono en su mano. —Estoy trabajando, ¿hay algún problema? Pablo suspiró. —El hospital ha contactado dos veces para el pago de tu padre, tu padre insiste en que se comuniquen contigo, dice que seguramente pagarás por Honorato, el departamento de pagos no quiere retrasar más esto, y han emitido una notificación para que Honorato sea dado de alta... Por respeto a Wálter, Pablo había controlado la situación toda la mañana, permitiendo que hablaran otra vez con Casimiro. Pero Casimiro simplemente no aparecía, y ahora Pablo no podía contenerse más, así que tuvo que llamar a Lucía. Lucía levantó la mano a su frente, y una lágrima brillante y clara cayó, una vena a